coqui fernandez: "siempre confie en mi intuicion"

EL COMERCIO. 01 de febrero del 2009

Para ver a Madonna en Lima se necesitan más auspiciadores

Así lo dijo Coqui Fernández, dueño de la empresa que trajo a Lima a Soda Stereo, R.E.M. y los Fabulosos Cadillacs

Por: Julio Escalante Rojas

El contagio fue contundente. Comenzó con “My Sharona”, una canción de fines de los setenta muy distinta a la música disco que tanto sonaba cuando Coqui Fernández tenía 12 años y ya vendía caset con canciones grabadas de la radio. Escuchaba y definía sus gustos musicales. “Sentía que el rock lo llevaba en los genes”.

¿Cómo ingresas a los espectáculos musicales?
En mayo del 92 comienzo como utilero de Los Nosequién y los Nosecuántos, cargaba los instrumentos, conectaba los equipos, tenía 20 años y ganar US$100 cada fin de semana era mostro. Pero en el 96 cuando la banda me pidió que sea su manager me di cuenta de que podía vivir de esto. En aquella época debí ser el manager más joven de una banda popular, y la chamba, ciertamente, me quedaba un poco grande.

Ingresaste a la Universidad Católica a estudiar Derecho, ¿culminaste la carrera?
Todas las actividades ligadas al rock hicieron que yo alargase la carrera, andaba muy distraído con la música, no sabía bien lo que quería y por eso hace un año recién acabé. Desde que ingresé me tomó casi 20 años, aunque la carrera la hice en nueve.

¿Por qué elegiste Derecho?
Porque me encantan los ideales de justicia y la filosofía. De chico siempre protestaba cuando algo me parecía injusto y pensé que eso bastaba para ser un buen abogado. Para ser bueno en lo que sea te tiene que apasionar, pero litigar en un ambiente de corrupción me desincentivaba mucho. Así es que me dejé llevar por la marea. En el 2001 organicé mi primer festival y comencé a traer artistas internacionales como Gustavo Cerati en el 2003. No sabía con certeza absoluta si me iba a dedicar a esto, pues de estudiar Derecho, una carrera tradicional que muchos considerarían como algo seguro en la vida yo me iba a lo inseguro. Me iba a un oficio incierto, como decía mi padre.

¿Cuál fue el primer festival que organizaste?
Uno donde junté a Madre Matilda, Libido y Mar de Copas en Miraflores. Tenía 29 años pero era un bebe en la organización de conciertos. Fue clave para seguir porque salió bien, fueron más de siete mil personas. Con eso pagué el 80% del carro que tuve en esos años. Se lo enseñé a mi viejo como gran logro y seguí dando la contra, siempre confié en mi intuición, en decir esto va resultar.

¿Y luego te planteaste algún plan de próximos conciertos?
Eso es lo difícil de este mercado. No puedes planificar porque las oportunidades aparecen y las tienes que tomar o se las lleva otro. Mi gran ejemplo es decir que en noviembre hice el concierto con REM y dos semanas después el regreso de Los Fabulosos Cadillacs. Cualquiera me diría estás loco por hacer dos conciertos tan seguidos, sumándole además los otros conciertos que se realizaron en fechas cercanas. Y eso sucede porque uno no puede planificar. Contraté a los Cadillacs en mayo y dije va ser un golazo, y luego apareció REM. Pensé que eran dos públicos distintos y dos oportunidades de negocio que resultarían, ¿cómo no hacerlo? Y me mandé.

¿Estabas convencido al inicio de que eras bueno para hacer negocios?
En el 2001 la organización de conciertos era una actividad extra, algo que nos gustaba a mi socio Toño Jáuregui, bajista de Libido, y a mí. Mi vida empresarial fue aprender sobre la marcha, creciendo. Hasta ese momento todo había sido muy azaroso, no fue porque un día nos sentamos con mi socio y dijimos tenemos talento para esto, vamos a hacer una empresa para ganar plata. No fue así. La idea era ayudar a una amiga que tenía problemas económicos. Pero cuando en el 2002 hicimos un concierto con Libido para 15.000 personas en Huancayo ya fue porque queríamos seguir.

¿Y ya eran empresa?
Nuestra sociedad no estaba constituida. La formalización como empresa no nos llamaba la atención, todo lo pasábamos con nuestros RUC de personas naturales. Ya para el concierto de Soda Stereo en el 2007 es cuando recién la sociedad existe.

*Saltaron una valla enorme al pasar de hacer conciertos pequeños a Soda Stereo…*El concierto de Cerati en el 2003, el más grande que habíamos hecho, tuvo una taquilla bruta de US$150.000 y de pronto con Soda saltamos 15 veces esa cantidad.

¿Traer a Soda Stereo les exigía demostrar la solvencia de la empresa?
Te pongo este ejemplo: para que una empresa opere en el Perú, una marca extranjera debe tener un billetazo de garantía y un prestigio que respalde que el proyecto y el negocio no se van a caer. Para Soda Stereo no teníamos nada de eso. El tema fue mágico, algo que en el negocio de la música creo que sí existe. Tres empresarios quisieron traer a Soda Stereo antes que nosotros, pero les intimidaba el costo, pues no había venido al Perú un artista que cobrara al menos la tercera parte de lo que pedía Soda. Entonces contacté a una persona que estaba dispuesta a poner el dinero, lo convencí de que me escuchase, porque yo tenía el contacto, ya había traído a Gustavo Cerati como solista dos veces, y logramos una buena imagen ante él. Según mis cálculos, necesitaba 22.500 boletos vendidos para recuperar gastos. Y el financista aceptó. Recuerdo además que mi hermano me sugirió que me comunicara con Cerati, él nos conocía y nos podría ayudar si el negocio se entrampaba como finalmente sucedió.

¿Qué pasó?
El financista se quitó y mi socio Toño y yo nos quedamos solos. Pero ya habíamos avanzado el 80% en el planeamiento del concierto y en conseguir auspicios. Por eso no nos quitamos. Cuando le dijimos a la empresa organizadora de la gira que le pagaríamos con la taquilla se rieron, entonces llamamos a Cerati y él los convenció. Los organizadores pedían un pago inicial de US$500.000 repartidos en 4 entregas semanales. Y lo único en efectivo que teníamos era US$25.000. Cerati les dijo que si no pagábamos él respondía. Y entonces el dueño de la gira aceptó.

¿Y cumplieron con enviar el dinero a tiempo?
Claro, si todo se vendió en 5 días. No necesitamos cuatro semanas, en una sola entrega les enviamos la cantidad inicial. Ni la empresa organizadora ni Cerati lo podían creer y acordamos hacer una segunda fecha de concierto. A partir de allí fue cuando crecimos como empresarios. Soda nos dio espaldas financieras y credibilidad.

¿Hoy se realizan más conciertos porque se eliminó el impuesto municipal a los espectáculos públicos no deportivos?
Ese impuesto no tenía razón de ser. Yo podría aceptar pagar una tasa de acuerdo al número de personas que asistían al concierto, pero cobrar el 15% por un evento al que van 300 personas y lo mismo por otro al que van 50.000 es ilógico, en el primero quizá no te alcance para limpiar las calles aledañas y en el otro te va sobrar. En ninguna parte del mundo se cobraba eso.

¿Faltan escenarios para hacer conciertos?
Sí. Por ejemplo, no hay estadios o coliseos techados. Para conciertos masivos solo están el Estadio Nacional y la explanada del Monumental. Se podría hacer conciertos dentro del estadio Monumental pero como empresario no podría, pues no me conviene que la gente que es dueña de los palcos vea el espectáculo gratis.

¿Te fijas una meta en la venta de boletos para asegurar el negocio?
Para Iron Maiden comencé a vender en la quincena de diciembre, aprovechando la Navidad, aunque el concierto todavía es en marzo y no me fue mal. Puedes recuperar en pocos días, como sucedió con Soda o puedes llegar al punto de equilibrio horas antes del concierto.

Con la disminución de tributos la gente esperaba que bajasen las entradas.
Antes no había entradas baratas ni conciertos. Ahora hay conciertos. Mi empresa, a pesar de tener costos más altos comparados con otros países, tiene precios más baratos que ellos. Pagar S/.21 para ver a REM en la tribuna es barato. Hay gente que querrá ir adelante y se quejará por no poder pagar pero hay otros que sí pueden, el mercado está dispuesto a satisfacerse a sí mismo.

Además, lo primero que se acaba es la zona delantera
En 10 horas ya habíamos vendido todo el primer sector para Iron Maiden. Si la gente responde, sería loco como empresario ponerlas más baratas. Yo prefiero que algunos sigan criticando y que sí haya conciertos.

¿Qué tendría que pasar para ver a Madonna?
El récord de inversión en auspicios para un concierto lo tenemos con Soda Stereo; la cifra no te la puedo decir, pero para Madonna se necesitaría el triple de eso y el Estadio Nacional lleno.

¿Algún día sucederá?
Sí. Porque el mercado se va a seguir desarrollando. Pero depende de las empresas ver la relación que existe entre el público y la música. En vez de gastar en campañas para raspar chapitas, deben darse cuenta de que la gente quiere espectáculos, hay una rabia natural porque hemos sido postergados históricamente.

LA FICHA
Nombre: Coqui Fernández *Edad: *37 años
Organización: People & Music es una empresa organizadora de espectáculos musicales.

http://www.elcomercio.com.pe/noticia/240104/coqui-fernandez-siempre-confie-mi-intuicion

ese tal coqui ya me cayó parke !!!!!!!!!!